Si tu respuesta se enfoca más a una marca o diseño en particular, tu
respuesta no va por buen camino. Otros factores, como el peso que tu auto puede
soportar, la velocidad máxima que puede
alcanzar o la fecha en la cual fueron fabricadas las llantas son los verdaderos
indicadores en los que te debes enfocar para realizar tu compra, y así
brindarle a tu auto la seguridad que
requiere para andar por el mundo.
Una camioneta no requiere las mismas llantas que un
automóvil normal, y mucho menos un vehículo de carga necesitará las mismas
llantas de uno pequeño. Lógicamente, para cada tipo de auto hay unas llantas a su medida. Saberlas comprar de acuerdo a ciertos cánones
puede ser decisivo para tu seguridad.
Las consecuencias de llevar unas llantas que no son
las adecuadas para tu vehículo son varias y algunas preocupantes que van desde
un mayor consumo de combustible, un incremento en la rigidez de la dirección,
un desgaste más rápido en las mismas, hasta problemas en la pérdida de potencia
del vehículo y en la adherencia de las llantas al asfalto. También, al usar
unas llantas que no son las adecuadas, éstas pueden deformarse, rasgarse y
dañarse muy fácilmente, incrementando las posibilidades de sufrir un accidente
de tránsito.
Por eso, es fundamental para cualquier conductor
preventivo aprender a comprar las llantas perfectas, además de que le realice
el mantenimiento preventivo y así evitar su desgaste prematuro.
¿Cómo comprar las llantas perfectas para tu
vehículo?
Lo primero que debes hacer es leer, en el manual
del propietario del automóvil, cuáles son las llantas que éste necesita. Esto
se hace debido a que el fabricante consigna en dicho manual la referencia
exacta de las llantas para las que fue diseñado el vehículo, para facilitar la
compra de unas nuevas llantas cuando éstas deban cambiarse, las cuales son
capaces de soportar sin ningún inconveniente las especificaciones del vehículo
(peso, potencia de motor, potencia de frenado, entre otros). Si no tienes este
manual, debes acercarte a un centro de
servicios confiable para que un experto te diga exactamente cuáles son las
llantas que debes comprar.
Un importante dato que debes tener en cuenta a la
hora de comprar las llantas nuevas para
un automóvil, es la fecha de fabricación de las mismas, la cual no debe ser superior a seis meses, ya que son unas
llantas viejas así no hayan sido usadas, debido a que el
caucho al entrar en contacto con el ambiente se empieza a
degradar, se vuelve duro, frágil y no tiene las mismas capacidades de trasmitir
las fuerzas de aceleración y frenado.
Una vez que ya has comprado las llantas para tu
vehículo, debes aprender a cuidarlas. Generalmente, estas tienen una vida útil aproximada de cuatro
años. Sin embargo, dependiendo del uso y cuidado que le des a tu auto, este
periodo puede ser menor.
Para cuidarlas, es recomendable que les realices un
mantenimiento constante, periódico y
concienzudo. Todos los días, antes de encender tu auto, realiza un chequeo
visual de las cuatro llantas y comprueba si éstas tienen perforaciones o
cortes. También, cuando le pongas
combustible a tu vehículo, pide que las calibren (llenarlas de aire) con un
calibrador preferiblemente metálico,
pues es más preciso. Revísalas también cuando reciban un fuerte golpe.
Para saber en qué estado se encuentran las llantas
de tu vehículo, es necesario que cada 6 meses o cuando el vehículo haya
recorrido 10 mil kilómetros, realices una alineación y balanceo a tu auto. La
alineación se le realiza a la dirección pero influye directamente en las
llantas porque los ángulos permiten que la banda de rodadura entre en contacto
perfecto con el piso. Cuando la
alineación no se cuida la llanta se apoya en los costados, que es la parte más
débil de la llanta, ocasionando daños en las mismas.
Cuando conduces tu auto de manera segura y
eficiente, sus llantas pueden alargar su tiempo de funcionamiento. Sigue las
siguientes recomendaciones:
- No frenes ni arranques bruscamente el vehículo.
- Revisa la presión de inflado. Verifícala en frío
una vez a la semana.
- Pide que calibren las llantas cada vez que le
pongas combustible al vehículo. Recuerda calibrar también la llanta de
repuesto.
- No conduzcas por calles ahuecadas a altas
velocidades.
- Evita los giros rápidos en curva y esquinas.
- Evita al máximo tener contacto con piedras o
vidrios, pues estos pueden perder el balanceo del auto, producir rayones en la llanta
y debilitar su integridad.