04 noviembre 2014

Buenas posturas en la conducción para evitar lesiones.


El latigazo cervical, las lesiones torácicas y determinadas patologías musculares que se producen tras un choque de vehículos se pueden evitar si se adopta una postura adecuada durante el viaje.

Otras patologías que se producen como consecuencia de las malas posturas durante la conducción son las lesiones torácicas, causadas por un uso inadecuado del cinturón, así como las lumbalgias o lesiones musculares de la parte posterior del muslo y la pantorrilla, generadas por una postura inadecuada a la hora de utilizar los pedales.

CONSEJOS

Se recomienda a los conductores verificar la altura y distancia del asiento, de manera que los pies puedan pisar a fondo los pedales del embrague, freno y acelerador, sin necesidad de inclinar o desplazar el cuerpo hacia delante, quedando así las piernas ligeramente flexionadas.

Asimismo, el respaldo debe adaptarse para que la inclinación del conductor sea lo más perpendicular posible y mantenga una distancia de por lo menos 25 centímetros respecto del volante.

Para comprobar que el asiento y el volante están correctamente regulados, el conductor puede encajar las caderas en el ángulo que forma la banqueta y el respaldo, apoyando bien la espalda, y extender el brazo izquierdo comprobando que la muñeca apoya sobre la parte superior del volante. Además, si su postura es la adecuada,  tanto las piernas como los brazos deberán quedar ligeramente flexionados.

Igualmente,  “el reposacabezas es un elemento de seguridad pasiva”. Para que su uso sea efectivo, el centro de gravedad de la cabeza, que está a la altura de los ojos, debe coincidir con la parte central y más resistente del reposacabezas.

Por otra parte, el cinturón debe quedar siempre a mitad del hombro, para evitar que no cumpla su función al resbalar por estar demasiado cerca del brazo o que provoque lesiones en el cuello por estar demasiado cerca de él.

Asimismo, se recomienda a los conductores descansar cada dos horas y aprovechar para hidratarse y hacer estiramientos de piernas, tronco, brazos y muñecas, para evitar contracturas y lumbalgias.