Pasado el examen para obtener la licencia, los
novatos conductores se enfrentan a la carretera con miles de consejos en su
cabeza, como por ejemplo: "¡Conduce con cuidado!" Pero en realidad,
¿qué quiere decir esa consigna tan genérica?
Conducir con cuidado para un conductor novato
significa sobre todo seguir las reglas básicas de seguridad. Por ejemplo,
mantener los nervios aunque no todo esté saliendo a la perfección ni tan bien
como salía cuando el profesor estaba a tu lado.
A veces es difícil cuando el novato se encuentra
solo. "Conducir es algo complejo: cambiar de marcha, frenar, indicar con
el intermitente...
Cuesta hasta que se convierte en una rutina. A eso
hay que agregar el estrés que puede generar una situación de tráfico.
Además, el coche nuevo o el prestado suele ser
diferente al de la autoescuela. Los conductores inexpertos deben tomarse su
tiempo en situaciones difíciles para poder reaccionar de forma adecuada y
prudente.
Para ello es
necesario aislarse de bocinazos o de impaciencias de otros. Todo novato tiene
derecho a tomarse el tiempo necesario.
La principal
dificultad es juzgar su propia capacidad al volante. La mayoría necesita tiempo
de experiencia y práctica para tomar conciencia de los peligros típicos, como
por ejemplo la alta velocidad, que suele ser la principal causa de accidente,
seguida de la falta de distancia de seguridad.
Un novato
puede ser un conductor inseguro pese a que tenga ya la licencia. Le falta la
práctica. El miedo a que pueda pasar algo es contraproducente.
Si se va en el coche junto a ellos hay que evitar
los sermones, ya que pueden provocar inseguridades o que los consejos entren
por un oído y salgan por el otro. Lo que deben hacer es dar consejos concretos
y transmitir su experiencia con el tono adecuado y de forma bien dosificada.
Por su parte, los novatos deben preguntar siempre que no tengan algo claro.